LA CALLE, LA LAMPARA Y YO

Hace tiempo, caminaba por una calle solitaria...

hacía mucho viento y había poca luz, tal vez era de noche;
tampoco habia plantas ni flores...,
no tenia mapas de aquel sitio y no sabia a donde llegaría,
sin embargo seguí caminando. 

LLegue a una intersección y no podía decidir a donde ir;
cualquier dirección que tomara daba igual, no sabía a donde me llevaría,
así que probé caminar un poco por esas calles,
pero no me gusto lo que veía, ni lo q escuchaba;
decidí entonces, dirigirme a otra calle,
que había divisado desde una esquina y que llamó mi atención porque se veía algo de luz.

Al llegar allí, vi que esa luz provenía de una lámpara de gas,
una solitaria pero hermosa lámpara de gas,
llena de ollín por todas partes,
pero con una llama inmutable a la acción del viento;
me senté a su lado y me dediqué a limpiarla,
ella es hermosa y me acogió brindandome toda su luz,
me enamoré de su brillo y su claridad... y decidí permanecer con ella. 

Ahora, ella brinda su luz para mi, para ella y para esta calle, 

y yo... solo la cuido mientras limpio su hollín.


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